“Para
enfrentar debidamente el descrédito de nuestro sistema institucional, es
necesario establecer un nuevo pacto social que siente las bases de un sistema
democrático verdadero, ponga fin al abuso institucionalizado” señala en
declaración pública emitida hoy por la Comisión Chilena de DD.HH.
Afirma que el actual estallido
social ha reinstalado la necesidad de avanzar en una solución de fondo, ante el
legítimo descontento expresado porte el pueblo chileno.
Por último, convocan a todas “las
organizaciones sociales y sectores políticos conscientes, a trabajar unidos por
la defensa de los Derechos Humanos, en especial, por el principal derecho
humano colectivo, el derecho a la libre determinación, única forma de comenzar
a recuperar como pueblo nuestra Soberanía y Dignidad”, dice el comunicado.
DECLARACIÓN PÚBLICA
1° La Comisión Chilena de
Derechos Humanos ha planteado reiteradamente, que, para enfrentar debidamente
el descrédito de nuestro sistema institucional, es necesario establecer un
nuevo pacto social que siente las bases de un sistema democrático verdadero,
ponga fin al abuso institucionalizado, enfrente decididamente la desigualdad,
ponga término a los privilegios y respete y garantice los derechos humanos.
2° El actual estallido social ha
reinstalado la necesidad de avanzar en este camino como solución de fondo al
legítimo descontento expresado por el pueblo chileno y como respuesta a la
situación de ingobernabilidad en que se encuentra sumido nuestro país, producto
de la ineficacia e incapacidad de las actuales autoridades para enfrentar
debidamente la ira e indignación social de un pueblo cansado de tanta
humillación y vulneración de sus derechos humanos fundamentales.
3° Para tal
efecto, se requiere elaborar una Nueva Constitución que establezca a través de
un modo genuinamente participativo, como la Asamblea Constituyente, las nuevas
reglas del juego democrático, cuya base de legitimidad sea la más amplia
participación de la sociedad chilena y sus organizaciones sociales y políticas,
y cuya redacción tenga como referencia ineludible, el cumplimiento irrestricto
de las obligaciones internacionales que tiene el Estado chileno en materia de
Derechos Humanos, las que comprenden, según los órganos del Sistema de Naciones
Unidas, las obligaciones de respetar, proteger y garantizar los derechos
humanos, como el derecho a la Vida, la Libertad, y los derechos a la Educación,
a la Salud, a la Seguridad Social, a una Remuneración justa, entre otros.
4° En lo inmediato, exigimos al
Gobierno, cese la represión y ponga fin al Estado de Emergencia y el Toque de
Queda, no sólo porque significa un grave retroceso para los Derechos Humanos y
una grave afrenta a la Memoria de nuestro país, especialmente a los familiares
de víctimas y a los sobrevivientes, sino porque la solución a la actual crisis,
no puede ser militar sino política.
No olvidamos que hace 46 años,
los sectores políticos que hoy gobiernan, recurrieron a las Fuerzas Armadas
para poner freno al proceso de transformaciones sociales y de mayor justicia
social que impulsaba el Gobierno legítimamente constituido de Salvador Allende,
y que el Golpe Militar que promovieron, dio inicio a la implementación de una
política de exterminio que trajo consigo miles de víctimas de violaciones a los
Derechos Humanos, y cuyas secuelas aún persisten.
5° Por último, convocamos a todas
las organizaciones sociales y sectores políticos conscientes, a trabajar unidos
por la defensa de los Derechos Humanos, en especial, por el principal derecho
humano colectivo, el derecho a la libre determinación, única forma de comenzar
a recuperar como pueblo nuestra Soberanía y Dignidad.
COMISIÓN CHILENA DE DERECHOS
HUMANOS
Santiago, 20 de octubre de 2019.-