Colegio
de Periodistas preocupado por ejercicio profesional a la luz de coberturas de
los últimos días
· Sustentada en el Código de Ética, mesa directiva de la orden
profesional reflexionó sobre el rol de la prensa en la sociedad.
· Lo acontecido, señalaron desde la organización, “es
reflejo de la necesidad de hacer cambios en la regulación y fomento de un
sistema de medios diversos y menos concentrado”.
El Colegio de Periodistas de
Chile se refirió a diversas informaciones difundidas por la prensa durante los
últimos días, que apuntan a la legitimación de un tipo de ejercicio profesional
basado en informaciones no necesariamente confirmadas y a un desequilibrio en
términos de cobertura para distintos actores y grupos sociales.
Ante esto, la mesa directiva de la organización relevó la importancia del rol
social de la prensa en un sistema democrático, que se debe al bien común y no a
las directrices de grupos de interés, debiendo siempre estar orientado a la
veracidad. Esto, a la luz de artículos sobre la Presidenta de la República y el reciente paro de camioneros.
“Hemos visto con
preocupación que, sobre la base de una herramienta legítima como es el off de
record, se esté dando pie a validar informaciones no confirmadas que, muchas
veces, pueden responder más a los intereses de actores que intentan incidir en
la opinión pública” expresaron desde la mesa directiva. Agregaron que
“este instrumento tiene el objetivo de proteger a la fuente cuando, por la
información que entrega, puede poner en riesgo su integridad física, situación
laboral o sufrir algún otro problema grave, pero no para difundir
elucubraciones o interpretaciones subjetivas”.
Señalaron que “esta práctica
ha sido rechazada por la propia ciudadanía, más aún cuando se ve que personas o
grupos que no tendrían motivos para esconder su identidad recurren a esto,
aunque sea en forma indirecta, para dar cuenta de sus visiones incluso sobre la
vida íntima de las personas”. En el fondo, puntualizaron, esto va
legitimando la impunidad y la no responsabilidad de los propios actos entre los
ciudadanos, algo que “el periodismo no puede ni debe fomentar o validar”.
Al respecto el Código de Ética
de la orden profesional señala expresamente en su artículo segundo que “el o
la periodista difundirá sólo informaciones fundamentadas, sea por la
correspondiente verificación de los hechos, en forma directa o a través de
distintas fuentes, así como la confiabilidad de las mismas”. Y
agrega en el séptimo que “el periodista debe transparentar sus fuentes para
legitimar ante la sociedad la información entregada, y sólo debe silenciarlas
si éstas se lo pidieren, previa confirmación de su idoneidad y confiabilidad,
respetando así la confianza otorgada al entregársele antecedentes reservados”.
Agregaron que en el caso de
información sobre la vida privada de las personas, el artículo vigésimo quinto
establece que esta solo será sujeto de cobertura cuando “la divulgación de
actos privados sea necesaria por razones de interés público”. Sin
embargo lo cual, siempre deberá “respetar la intimidad de las personas en
situación de aflicción o dolor, evitando las especulaciones, el morbo y la
intromisión gratuita en sus sentimientos y circunstancias cuando ello no
represente un aporte sustancial a la información”.
La mesa directiva también se
refirió al necesario equilibrio en la cobertura de los distintos hechos del
acontecer nacional, llamando a no privilegiar a determinados sectores por sobre
otros. Esto, señalaron, “quedó claramente establecido con la amplia
cobertura dada a la llegada de los camioneros a Santiago en desmedro de otros
hechos relevantes en el mismo momento, como el quiebre de las negociaciones
entre la Confederación de Trabajadores del Cobre con Codelco, o las
movilizaciones que en ese y otros momentos han realizado organizaciones en
demanda de sus propias reivindicaciones”.
El Colegio de Periodistas
señaló asimismo que “rechazamos categóricamente la denostación de todo
periodista por el rol que ejerce libremente. Con estos planteamientos
buscamos llamar a la reflexión sobre el ejercicio ético del periodismo y el rol
que la sociedad nos entrega”. Y concluyó: “Esto es reflejo de la
necesidad de hacer cambios en la regulación y fomento de un sistema de medios
diversos y menos concentrado, algo que seguiremos impulsando con fuerza en el
proceso constituyente anunciado, en el contexto de un debate sobre los
contenidos de una nueva Constitución y el mejor mecanismo para llegar a ella”.